La plaza ya era llamada coloquialmente «Plaza Armenia», por la fuerte presencia de la comunidad en esa zona.
Costa Rica, C1414 CABA
El nombre «Inmigrantes de Armenia» hace referencia a los refugiados armenios que llegaron a comienzos del siglo XX escapándose del genocidio cometido por el Estado turco entre 1915 y 1923.
La Legislatura porteña aprobó el 12 junio 2014 al mediodía por unanimidad el cambio de nombre de la plaza de Palermo, ubicada en las calles Armenia, Costa Rica, Nicaragua y Malabia, que pasará a llamarse plaza «Inmigrantes de Armenia».
El nombre «Inmigrantes de Armenia»
El nombre «Inmigrantes de Armenia» fue elegido en homenaje a los refugiados armenios que llegaron a nuestro país a comienzos del siglo XX, escapándose del genocidio cometido por el Estado turco entre los años 1915 y 1923. La ex plaza Palermo Viejo, rebautizada el año pasado como «Inmigrantes de Armenia» en homenaje a los refugiados que llegaron al país a comienzos del siglo XX, fue inaugurada en 1979 bajo la gobernación de Osvaldo Cacciatore. Anteriormente funcionaba allí el gasoducto más grande de Buenos Aires, que fue desmantelado por razones de seguridad y también porque desvalorizaba las propiedades de los alrededores.
Plaza Armenia está solamente a cuatro cuadras de Plaza Serrano, ambas ubicadas en lo que hoy en día se conoce como «Palermo Soho». Esta plaza está delimitada por las calles Armenia, Costa Rica, Nicaragua y Malabia. En comparación con Plaza Serrano, esta es una plaza mucho más grande, con más espacio verde para dar vueltas, y muchos juegos para los chicos. Tiene una historia particular, ya que en los años 50 pasaba un gasoducto por este lugar. Por suerte fue desmantelado por razones de seguridad.
A raíz del desarrollo inmobiliario de Palermo Soho, la llegada de bares y restaurantes, y el crecimiento de su feria artesanal, la plaza Armenia se convirtió en un ícono de la zona, punto de encuentro de turistas y vecinos. Sin embargo, el paso de los años y la falta de reformas profundas atentaron contra su estado: veredas rotas, falta de iluminación y escasa vegetación son algunos de los problemas que presenta el espacio verde.
Plaza Campaña del desierto
En el origen de esta plaza, por los años 50 y 60 funcionaba aquí el gasoducto más grande de Buenos Aires, ocupando casi toda la manzana, con cinco pisos de alto de su tanque. Fue desmantelado por razones de seguridad y se construyó una plaza llamada entonces Campaña del desierto, hasta que en 1998 se le dio el nombre de Palermo Viejo.
Es una zona que reúne varias colectividades, Armenia, Judía, Hindú, Cristiana. Habiendo tanto iglesias como colegios que las representan.
Los sábados por la mañana funciona sobre la calle Nicaragua, entre Armenia y Malabia, una feria de alimentos frescos, frutas, verduras, quesos, fiambres, pescados, panificados, dulces. Sobre Malabia y Costa Rica funciona los fines de semana una feria de ropa y artesanías.
– La Feria de Plaza Armenia
Durante los fines de semana funciona sobre la calle Malabia y Costa Rica una feria de artesanos en la plaza. Si bien la feria no es muy grande, esta buena para darse una vuelta, se pueden encontrar cosas de casa como adornos, platos decorativos, plantas, y también mochilas, accesorios y ropa.
La Feria «Plaza Palermo Viejo» abre sus puestos todos los sábados, domingos y feriados en el horario de 10 a 20 Hs.
La plaza ofrece distintas actividades especialmente para los niños. No solo hay dos lugares bastante amplios con juegos de todo tipo, si no que también hay actividades programadas durante los fines de semana. Cuando estuve yo estaban haciendo un taller de pintura para lo más pequeños, y también había shows en vivo de payasos. Es una plaza ideal para traer a los chicos porque con tanto para hacer no se van a aburrir.
A lo largo de Plaza Armenia esta lleno de restaurantes y bares para sentarse a comer o tomar algo. Hay mucha diversidad en la oferta, así que ya sea para desayuno, almuerzo, merienda o cena: algo hay seguro en Plaza Armenia. También es IDEAL para ir un día con clima agradable, ya que todos los lugares tienen terraza que da a la plaza, y se genera un clima hermoso.
Historia del por que de Plaza Armenia
Cabe decir que cada 24 de abril se recuerda al millón y medio de armenios masacrados por la Turquía Otomana, la fecha simboliza la decapitación estructural del pueblo armenio. Por lo cual se dispuso, por Ley Nacional N° 26.199 y de la Ciudad N° 2058, que el 24 de abril se conmemora el «Día de acción por la tolerancia y el respeto a los pueblos» en homenaje al pueblo armenio por el genocidio sufrido entre 1915 y 1923.
La plaza «Palermo Viejo» ahora se llama «Inmigrantes de Armenia»
El Lunes 11 de agosto de 2014, En un acto encabezado ayer por el vicepresidente 1 º de la Legislatura de la Ciudad, Cristian Ritondo, se concretó el cambio de nombre de la plaza «Palermo Viejo», ubicada en las calles Armenia, Costa Rica, Nicaragua y Malabia, por plaza «Inmigrantes de Armenia», iniciativa aprobada por unanimidad en la Legislatura porteña.
Participaron del acto el Presidente de la República de Armenia, Serzh Sargsyan; el Subsecretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural, Claudio Avruj; el Director Gral. de Colectividades, Julio Croci; la Ministra de la Diáspora, Hranush Hakobyan; la Diputada de la Ciudad, Lía Rueda; el Presidente de la Junta Comunal de la Comuna 14, Maximiliano Corach; los comuneros María Amelia Alonso, Julio Figueroa y Paula Herrera, y el presidente del Club Deportivo Armenio, Noray Nakis.
También asistieron los diputados de la Ciudad, Carmen Polledo, Daniel Presti, Juan Pablo Arenaza, Gabriela Seijo, Virginia González Gass y Edgardo Form, entre otros.
Popularmente esta plaza ya era conocida como»Plaza Armenia» debido a la importante presencia de la comunidad en la zona. El nombre «Inmigrantes de Armenia» fue elegido en homenaje a los refugiados armenios que llegaron a nuestro país a comienzos del siglo XX, escapándose del genocidio cometido por el Estado turco entre los años 1915 y 1923.
Palermo tiene una Baldosa recordatoria al luchador profesional y actor Martín Karadayijan
Palermo tiene una Baldosa recordatoria al luchador profesional y actor Martín Karadayijan en la Plaza Inmigrantes de Armenia del barrio de Palermo. Fue la máxima figura del programa televisivo «Titanes en el Ring», que se emitió por más de 30 años. Karadayijan nació el 30 de abril de 1922 en un conventillo de San Telmo y era hijo de Hamparzún – armenio- y Paulina – española-.
Su infancia no fue la de un niño común. La tuvo que pelear lustrando zapatos y mendigando por las calles de Buenos Aires, para poder ayudar a su madre española Paulina Fernández. También vendía caramelos en los tranvías junto a sus amigos. Vivió esos años en la mayor de las miserias. Pero el destino quizo que la vida cambiara para Karadagian al incorporarse al deporte en lucha greco romana.
Con sólo 8 años, obtuvo en la ciudad de Detroit, Estados Unidos y representando a la Asociación Cristiana de Jóvenes, consiguió el título Panamericano infantil en esa disciplina.
Durante años fue el máximo ídolo infantil, y cuando su figura irrumpía en el cuadrilátero, los niños y los adultos coreaban a viva voz: “Ya llegó Karadagián, el gran Martín es un titán. Martín es el titán de Titanes en el ring porque es genio y figura con Joe Galera y con la viuda. Siempre será Martín, glorioso paladín, el más genial Campeón Mundial”. Mientras practicaba lucha, también comenzó a interesarse en el teatro, disciplinas que fueron forjando al personaje que todos amamos sobre el ring. Fue en 1957 que se inició como actor en la película “Reencuentro” de Iván Grondona, la cual no tuvo ninguna trascendencia, pero fue el puntapié inicial para el comienzo de una gran carrera. Aquello le permitió compartir escena junto a otro grande, Alberto Olmedo, en su filme “Las aventuras del Capitán Piluso en el castillo del terror”.
Martín Karadagián fue un deportista, luchador profesional y actor argentino, cuyo nombre verdadero era Martín Karadayijan1, creador del espectáculo televisivo titulado Titanes en el Ring.
Hijo de inmigrantes —padre armenio y madre española—, aprendió lucha grecorromana desde niño.
Comenzó su carrera como actor en Reencuentro con la gloria, de 1957, un drama dirigido por Iván Grondona en que representaba el papel de un luchador en decadencia, que accidentalmente mata a un contrincante en el ring. Seducido por el medio, al año siguiente apareció junto a Alberto Olmedo en Las aventuras del Capitán Piluso en el castillo del terror, pero para entonces ya había encontrado su veta definitiva: fascinado por los espectáculos de lucha en el Luna Park, en 1962 creó la troupe de Titanes en el Ring, que lograría un éxito enorme en la televisión argentina y unos años más tarde, en toda América con la participación de excepcionales luchadores como Alejandro Rodrigo que fue el único quien finalmente terminó haciendole la competencia con la troupe Colosos de la Lucha y fue un gran éxito.
Dentro del espectáculo de los Titanes, el personaje que desempeñaba Karadagián era el de campeón del mundo de lucha libre, quien tenía un secretario llamado Joe Galera y una admiradora conocida como La viudita de las flores rojas. Lucharían en el Luna Park. En un encuentro entre Karadagián y la momia, el Canal 9 inauguró su primer móvil de exteriores. El espectáculo fue transmitido por televisión durante años, además de realizarse dos películas para cine.
Martín Karadagián murió un 27 de agosto de 1991. Falleció en la clínica Agote de la ciudad de Buenos Aires, víctima de un edema pulmonar a los 69 años de edad.
Desde mediados de los 80’s el gran Martín había sufrido la amputación de una de sus piernas por su diabetes, lo que le impidió seguir siendo el principal protagonista del recordado espectáculo familiar de «Titanes en el ring». Con su desaparición física, Karadagián dejó un gran vacío en la audiencia televisiva y se convirtió en un ícono de los 70 y 80.
Murió a los 69 años, y sus restos están enterrados en el cementerio de Recoleta. Un busto en la calle Pacheco de Melo al 1800 realizado por la artista plástica Telma Membri (La viudita de las flores rojas), le rinde homenaje.
CINE
Titanes en el ring es una película argentina del género comedia filmada en colores y dirigida por Leo Fleider, según su propio guion. Fue estrenada el 4 de enero de 1973 y tuvo como protagonistas a Martín Karadagián, Ovidio Fuentes y Gloria Raines.